3 ago 2010

LA AMBICION DEL DINERO PODRIA DAÑAR LNB, POR OSVALDO RODRIGUEZ SUNCAR


SANTO DOMINGO-La ambición de algunos podría hacerle mucho daño a la Liga Nacional de Baloncesto (LNB).

Y es que entre algunos de los agentes que intervienen en el certamen que organiza esa entidad se ha despertado la codicia, por una expresión muy dominicana: “¡Ahí hay cuartos!” La incursión de las empresas que manejan algunos de los equipos de béisbol profesional del país (Escogido y Estrellas), más la presencia de familias y personas acaudaladas entre los nuevos accionistas de los equipos de la liga de baloncesto, han dado lugar a la idea que en la LNB “se va a guisar”.

Entre quienes así piensan hay agentes de todo tipo: jugadores, técnicos, entrenadores, comercializadores.

La realidad económica de la LNB es otra.

Como continuación de la LIDOBA (su nombre anterior) la Liga (haciendo referencia a ésta y los equipos) arrastra muchos de los problemas económicos de la primera: sus carencias y limitado techo para hacer negocios.

Por eso, en un reciente debate sobre el calendario del circuito, fue necesario someter la decisión final a votación (5-3).

Prevaleció el criterio de sólo un juego diario, para así transmitir por televisión nacional todos los partidos. Solo que esas transmisiones representan una posibilidad mínima de ingresos económico directo para los equipos, tres de los cuales querían más de un juego por fecha, para poder hacer su propia transmisión por televisión en su localidad.

A la distancia parece que aquellos que hayan comprado el derecho de comercialización general del evento serán quienes se servirán con la cuchara grande, por cuanto los equipos sólo tendrán cuatro minutos de publicidad disponibles a su favor en cada transmisión.

El resto del tiempo para publicidad será para la empresa comercializadora, la cual pagó 12 millones de pesos por esos derechos, dinero éste que está destinado al montaje del evento.

Pero entonces, surge la pregunta: ¿Cuáles son las fuentes de financiamiento importantes que tendrán los equipos? ¿La venta del uniforme? ¿Sin las llamadas incidencias en las transmisiones (renglones especiales de menciones como canasto, falta personal, línea de tiros libres, tiro de tres, saque de bola, etc.)? Así es difícil conseguir un buen patrocinio.

¿La boletería? Ningún espectáculo de ese tipo se cubre con las recaudaciones por ese concepto. ¿La transmisión por radio? La venta de publicidad por ese medio no se acerca, ni en el monto del dinero, ni en cantidad de anunciantes, a la de la televisión, resultando insuficientes sus ingresos para cubrir los costos de un equipo. Por eso, la comercialización general del evento podría estar afectando sensiblemente la economía de los equipos, de manera particular.

Sin importar qué tan profundos sean los bolsillos de los dueños de esos equipos, se supone que operar con déficit no fue la idea que motivo a esos dueños a ingresar en la Liga. leer mas

No hay comentarios: